Instituto Incipia 2025

Octubre 2023 (30/10/23) .

Leyes universales II

Hoy tendremos a un invitado, Eduardo, especialista en terapia Quiropráctica, que nos mostrará su visión holística de la realidad y su forma de intervención.

• Repasaremos la ley de lo mental y de la correspondencia.
• También profundizaremos en la ley del karma y la ley del ritmo.

En las clases anteriores comentábamos:

• La ley de lo mental y la ley de la correspondencia.
• La importancia de defender nuestro poder personal (vídeo de la niña y la pelota y ejercicio de la hoja con el punto) .
• En la anterior, la necesidad de transformar nuestra identidad para poder dar paso a una nueva definición de nosotros mismos (vídeo de Indiana Jones y el paso al vacío)

Ley del Karma.

Todo lo que hacemos tiene consecuencias. Desde las cosas pequeñas hasta las grandes. Desde la teoría de las vidas anteriores hasta las consecuencias de mis palabras en un enfado.

Muchas veces ponderamos el riesgo al realizar una acción, una inversión, pongamos por ejemplo. A partir de lo que invierto, espero un beneficio. Si hay pérdidas, es por mis actos. Por lo tanto, necesito aprender de la frustración.

Este punto es clave, es poder comprender que la frustración es básica en el desarrollo y que es necesaria en el aprendizaje. No podemos avanzar sin frustración, no es posible, entra dentro de la naturaleza humana. Curte la intención y la revitaliza siempre y cuando ese aprendizaje aparezca.

La acción contraria al Karma es el Dharma, es decir, el camino de la iluminación una vez superadas las pruebas que nos ha impuesto la vida. Podemos quedarnos quejándonos, criticando y otras muchas salidas falsas que nos ofrece la frustración. La única vía que nos ayuda a salir del laberinto de las pasiones es la aceptación. Esa aceptación abre la puerta a la tranquilidad necesaria del aprendizaje y la reflexión sobre «lo que está pasando».

Ese karma tiene muchas ventajas. Por ejemplo, sabemos que Sísifo, cuando se le cae la piedra rodando por la montaña va a tener que volver a subirla hasta que tenga el perdón de los DIoses. Y, ¿cuándo llega?. Es necesario un tiempo de elaboración, de fermentación de concienciación de lo que ocurre.

Ese momento de liberación del Karma viene a través de la iluminación por parte de la conciencia del tema o del hecho en sí, en donde se puede ver el error que cometía uno. Siempre hay una responsabilidad.

Ley del ritmo

Según la ley del ritmo, todo es ritmo. Todo tiene su ir y su devenir, su acción y su pausa. Los ritmos se encuentran desde las estrellas hasta las rocas y los ríos. El átomo tiene su ritmo y todo lo que nos rodea.

Dentro de la ley del ritmo cabe destacar la interacción con otras leyes. El karma tiene su ritmo, la correspondencia tiene su ritmo, la ley de lo mental también lo tiene.

Es la energía dinámica que avanza sin cesar en todo lo creado, tanto físico como lo intangible o trascendente.

La aplicación de esta ley al nuestro funcionamiento es importante. La adecuación a las diferentes estaciones, los ritmos circadianos del día y de la noche, los ritmos lunares y su influencia en nuestros ritmos biológicos, los ritmos en las actividades, los ritmos de las plantas y las flores, los ritmos de nuestro comportamiento y de nuestras emociones.

Para sentir tenemos un ritmo. Para pensar lo ponemos en práctica también.

Si soy capaz de ser consciente de estos ritmos y adecuarlos a mi conveniencia, estoy ganando la conquista de mi mundo interior. Es importante tener en cuenta la interacción entre los ritmos. Hay ritmos que abarcan a otros.

Por ejemplo, en una conversación, si el ritmo es sugestivo y motivador, si es ágil y fresco, nos quedamos prendados al conferenciante. Si por el contrario, el ritmo es soso y aburrido, la conferencia nos incita al ritmo del dormir, teniendo que disimular un bostezo.